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“RECUERDE EL ALMA DORMIDA”

La lucha almada

en el videoarte peruano del milenio nuevo

Artífices varios

_VIDEO_SUR / PALAIS DE TOKYO
París – Francia

EXPOSICIÓN (Curaduría: Gustavo Buntinx)

210

15 de febrero
12 de marzo
2018

LA LUCHA <u>ALMA</u>DA<br>(Sinopsis curatorial)<br>Gustavo Buntinx


Gustavo Buntinx

LA LUCHA ALMADA

(Sinopsis curatorial)


Patricia Bueno / Susana Torres
Identikit
2007
Video / 07:51′
Colección MICROMUSEO
(“al fondo hay sitio”)

Si quitas el exterior
queda el interior
Si quitas el interior queda el alma

(Frase manuscrita sobre una pizarra
en la escena de apertura del video Identikit,
de Patricia Bueno y Susana Torres
Texto tomado de la película Vivre sa vie,
de Jean Luc Godard)
 

Tras dos décadas marcadas por la guerra incivil (1980 – 1992) y la neodictadura (1992 – 2000), el Perú transita a la democracia del siglo XXI con una insinuante búsqueda del Eros que permita abatir al Thatanos persistente siempre en nuestra sociedad impactada.

Una pulsión de vida que se manifiesta también desde la búsqueda espiritual. Incluso religiosa, en el sentido etimológico de religare: recomponer una comunidad fragmentada.

La selección muy parcial de videos aquí propuesta recoge apenas algunas de las evidencias culturales de esta lucha almada, erigida en resistencia a las ideologías de muerte, las múltiples luchas armadas cuyo legado todavía procura envenenar al país y al arte y a la condición humana misma.

El arte —cierto arte— responde a tales asedios de lo siniestro recuperando sus espacios de  contemplación. Y de esperanza. Espiritual, existencial.

Pero esa vocación erótica distinta, esa libido que se regenera, es instintiva antes que programática. Ella no se declara: se infiltra, a veces inconscientemente, en registros varios cuya diversidad este compendio evidencia.

Desde las pulsiones mítico-sexuales de la Amazonia (Christian Bendayán) hasta las actitudes más contemplativas y esotéricas (Ana Rosa Benavides, el grupo Íntegro). Pasando por la sacralización de la naturaleza (Melissa Herrera – Carlos Morelli, Carmen Reátegui); la interiorización personal de la guerra (Patricia Bueno – Susana Torres, Giancarlo Scaglia); la sublimación traumática de los exilios interiores (Chiara Macchiavello, Moico Yaker – Delia Ackerman – Rhony Alhalel); la contemplación melancólica de la ruina (Carlos Runcie Tanaka, Maya Watanabe); el delirio apocalíptico (Jaime Miranda Bambarén – Erasmo Wong Seoane).

Tensiones dispersas cuya revisión conjunta, rearticulada (religare), nos devuelve a la visión omnicomprensiva de una metafísica. Tal vez, por momentos, una teología. O quizá una mística.

Ojalá.

En un país en el que todo exterior nos fue quitado, y se pretendió despojarnos también de la interioridad misma, asoma y nos inquieta la búsqueda de una espiritualidad supérstite.

Un “recuerde el alma dormida”, ese clásico verso de Jorge Manrique compuesto a finales del siglo XV, pero de radical vigencia en nuestros tiempos liminales, acaso terminales.

En castellano antiguo ─recordemos─ recordar significa tanto despertar como hacer memoria.

Una confluencia de sentidos de sensible pertinencia para nuestros peruanos trances de prolongado duelo.

La lucha almada.

Maya Watanabe
Escenarios
2014
Video. Tres canales /
/ 15:00′ cada video (sinfín)
(Fotograma tomado de Escenarios II)

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