Jesús y María de la Cruz
frente a la laguna de Huachucocha,
entre Chavín de Huántar y Chacas,
en la alturas de Conchucos, Áncash,
durante el peregrinaje que dio culminación
a Pacha kutiq wanka,
proyecto de Martín Bonadeo
incitado y acompañado por MICROMUSEO
2018
(Fotografía: Roxana “Lilulí” Buntinx)

IN MEMORIAM,
MARÍA DE LA CRUZ

GUSTAVO BUNTINX

Se cumple ya una semana del tránsito de María,
esposa de Jesús de la Cruz.

Dos de los seres más luminosos que hayamos tenido la dicha
de involucrar en nuestras rutas y extravíos.

Como aquel Altro Viaggio,
el “Viaje Otro” que hace seis años realizamos en las cumbres andinas de Áncash,
con un centenar de otras personas,
para acompañar las vicisitudes de Pacha kutiq wanka:
un proyecto mágico de Martin Bonadeo,
incitado y acompañado por MICROMUSEO.

Jesús, nuestro museógrafo estrella,
había culminado el montaje de esa exposición en el Museo Nacional de Chavín.
Y luego nos acompañó con María durante una semana
en nuestras travesías místico-libidinales por todo el Callejón de Conchucos.
Explorando la senda de la obra impresionante
lograda desde esos parajes remotos por los Artesanos Don Bosco
y otros seguidores del Padre Ugo de Censi.

Como aquellos seres deslumbrantes
que en las alturas de la laguna Huachucocha
lograron crear una vaquería y una industria artesanal de quesos insólitos.
A 4,250 msnm.
Héroes culturales, espirituales,
cuyo ejemplo nos ilumina.

Algo de esa luz quedó reflejada en esta fotografía,
conmovedora,
tomada por Roxana “Lilulí” Buntinx.

Allí se los ve a Jesús y María,
juntos, radiantes,
ante la religiosidad irradiada por lo sublime de esa naturaleza nuestra,
tan desafiante.

Y lo sublime también de quienes responden a sus retos
con humanidad y nobleza.

Así te recordaremos siempre, María.
Para en algún momento reencontrarnos.
En esas u otras Alturas.

(Abajo, a la izquierda, de espaldas,
Fátima Buntinx Torres contempla lo lejos).