NEOCRIOLLO
La inquietante exposición de Mónica Girón
en el MALBA y en LatinArt
13 de enero
2008
Mónica Girón
Ampárame y guíame
1998
Ciervo: cera, parafina, resina de retama
Cuadro: acuarela sobre papel, marco de madera y vidrio
Vitrina: madera laqueada y acrílico cristal / 215 x 214 x 195 cm
NEOCRIOLLO
LA INQUIETANTE EXPOSICIÓN DE MÓNICA GIRON
EN EL MALBA Y EN LATINART
LatinArt, la conocida revista virtual de arte latinoamericano, otorga una cobertura importante a Neocriollo, la exposición de Mónica Giron acogida hasta hace unas pocas semanas por el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA). Además de una generosa publicación de imágenes, LatinArt recoge la última y ampliada versión del texto curatorial de Gustavo Buntinx, enriquecido por una traducción al inglés enteramente nueva.
Por cierto, una de las piezas más significativas incluidas en Neocriollo ha sido hace poco comprada por el propio MALBA e incorporada a su última exposición de adquisiciones. Se trata de Laguna, una masa colgante a la que el texto aludido le dedica reflexiones densas, relacionándola estrechamente con la obra culminante del conjunto todo.
A continuación el fragmento pertinente:
Mónica Girón
Laguna
2006 – 2007
Cera, parafina, resina de retama, metal, tela, pigmentos, cuerda de acero /
/ 80 x 128 x 80 cm
(formato irregular)
“La culminación de esos tránsitos es una biopoética matricial cuya formalización más extrema podría ser aquella Laguna última (2006 – 2007) que se ofrece suspendida como un meteorito protozoico de ubres colgantes y protuberancias obscenas. El caldo de cultivo para lo arcaico y lo porvenir, cuyas formas informes pugnan por brotar de la cera que las confunde y las configura al mismo tiempo. La matriz multípara de un cuerpo inédito y proteico.
Una emergencia orgánica que en otra pieza reciente (2003 – 2006) adquiere dimensiones monumentales y una denominación casi épica: Neocriollo, como el ‘monstruo de laboratorio’ en que [Leopoldo] Marechal personifica los artificios lingüísticos concebidos por Xul [Solar] para la resolución utópica de las tensiones babélicas en el Río de la Plata. La lengua adánica de una ciudad futura que Giron encarna en el volumen colectivo de un racimo semi-humano, seres inconclusos cuyo perfil individualizado de infantes y adultos no alcanza a distinguirlos ni separarlos de la masa informe que los aglutina y los constituye como ente reunido.
Mónica Girón
Neocriollo
2003 – 2006
Cera, parafina, resina de retama, mdf, metal, tela /
/ 220 x 125 cm
(formato irregular)
(Tres vistas)
Una masa acaso heroica cuyo aspecto también siniestro se ve exasperada por el despliegue perturbador de pupilas que son su punctum punzante y visivo. La configuración inquietante y literal del raro aura postulado por Benjamin en la mirada que el objeto observado devuelve sobre el observador, sobre su mirar así trastornado.
Mónica Girón
Neocriollo
(Detalle)
2003 – 2006
Lo desestabilizante de esa insinuación es aún más intenso en la Laguna, donde sin embargo se ve atenuada por las marcas circulares que dan sentido cultural y cósmico a la voluptuosidad de los recodos y pliegues en este cuerpo enteramente erógeno. Incisiones casi anatómicas asociables para Giron a esas otras, espiraladas, en las piedras neolíticas que marcan el umbral y la culminación del pasaje subterráneo de Newgrange, en Irlanda. Un espacio de sugerencias no funerarias sino uterinas. No una tumba sino un vientre, atravesado durante el solsticio por un fugaz rayo solar que impregna de luz sus inscripciones mistéricas.
Incisiones en piedras del complejo neolítico de Newgrange, Irlanda.
La fecundación, la fecundidad de la prima materia, podría ser el otro y alquímico sentido de estas fascinantes, revulsivas, piezas. Desde la acumulación de materia esférica que relaciona al boceto cerámico de Neocriollo con una prehistórica Venus esteatopígica. Hasta la vida distinta que emerge de la masa gelatinosa. Como el esperma iridiscente entre la turbiedad láctea del semen, como la fosforescencia ovular en el flujo embrionario. Metáforas que adquieren ahora una densidad nueva ante la disolución final de las fronteras corporales por los avances de la ingeniería genética.
Mónica Giron
Neocriollo
2002
Barro /10 x 5 x 5 cm
(formato irregular)
(Tres vistas)
Esta humanidad naciente es también la especie que contempla su extinción probable, su inevitable tecnomutación incierta. Sus perspectivas indescifrables. El obscurecimiento del mundo. Y las iluminaciones póstumas del aura”.
(Gustavo Buntinx)